Conteste su identidad como foro de reunión y de trabajo de los decanos de las escuelas de Ingeniería de nuestro país, CONFEDI se ha mantenido alerta y muy activo desde el instante inicial en que las repercusiones de la pandemia COVID-19 tocaron tierra en nuestro suelo y el de nuestra región.
Como punto de convergencia de la inmensa mayoría de los decanos y autoridades equivalentes, las preocupaciones, las inquietudes, las incertezas, las ideas, las esperanzas y los cursos de acción fueron y van siendo parte del intercambio cotidiano, y esa fortaleza de diálogo y de construcción positiva nos han vuelto a mostrar que la columna vertebral de CONFEDI se halla firme y saludable.

En tal quehacer hemos compartido el enorme esfuerzo y laboriosidad de nuestros docentes, estudiantes y graduados por sumar, por hacer su parte. Ha sido incesante y hasta heroico el aporte de experiencias sobre lo que se está haciendo aquí y allá para colaborar y cooperar con el sector de salud desde nuestra Ingeniería, en toda nuestra geografía. Ha sido y es gratificante y digno del mayor elogio la manera en que los docentes de cada unidad académica se pusieron al hombro estar a la altura de la hora para comenzar a desplegar un nuevo período académico haciendo uso exclusivo de herramientas de virtualización y mediación cuyo uso en estas condiciones ni se imaginaba no bien estábamos regresando entusiastas de las vacaciones de verano. La preocupación y ocupación para que los estudiantes se sientan parte de la empresa, para mantener el diálogo, para extender el vínculo, ha sido y es magnífica. Y otra vez, a lo largo y ancho de toda la geografía.

CONFEDI desea mediante el presente expresar su mayor reconocimiento y gratitud a los docentes, estudiantes, no-docentes, graduados y autoridades que, en nuestras unidades académicas, han mostrado y seguirán mostrando lo mejor de sí, lo mejor de nuestra fibra de Ingenieros y de educadores, para cooperar con sentido humanitario siendo y haciendo su parte de hebra en el tejido de prevención, mitigación, contención y proyección de esta experiencia inédita que nos ha tocado. Como educadores sabemos bien que si hay algo que la pandemia COVID-19 nos tiene que dejar es enseñanza, a los Ingenieros, a nosotros sus formadores y al resto de la sociedad, y que depende de nuestra voluntad y labor de reflexión y autocrítica honestas, y de nuestra superior motivación por aprender, que tal enseñanza mude a aprendizaje. Que así sea, y gracias. Muchas gracias por hacer cada uno su parte.

Consejo Federal de Decanos de Ingeniería, CONFEDI
Argentina, abril de 2020