Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), por lo menos un 50% de las enfermedades mentales comienzan antes de los 14 años, la mayoría de los cuales pasan desapercibidos. Cifras oficiales para el 2019, revelan que cerca de 1000 millones de personas viven con algún trastorno mental; 3 millones de personas mueren cada año por el consumo nocivo de estupefacientes y una persona se suicida cada 40 segundos. El rostro humano es una parte intrincada y altamente diferenciada del cuerpo. Es el sistema de señales de sociabilización más complejo que existe y está demostrado que el sistema nervioso autónomo genera rasgos, a veces imperceptibles, del estado cognitivo y patológico del cerebro. Este proyecto pretende el reconocimiento de algunas emociones a través de la biométrica de las facciones del rostro. La idea es crear un instrumento que sirva a los médicos especialistas para evaluar con mayor confiabilidad el estado emocional del paciente, a partir de los cambios sutiles que se producen en su biodinámica cuando se encuentra sometido a un estímulo emocional. La etapa de hardware del sistema, utiliza una cámara de video conectada a un computador. El software se diseñó para realizar el análisis del video enfocado sobre el rostro del paciente.